sábado, 4 de septiembre de 2010

La muñeca rota


Fiera demandante
¿amas?
Amor traducido en furia
¡Sangre! en ebullición desborda tu ojos.

Humor carmesí surcando

el rostro femenil

delineando angustias.
Prisionero de un delirio
atacas sin piedad.
¡Caricias mortales!
Mutan en odio lo que fuera amor
La muñeca de porcelana se quiebra

La abandonas en un rincón.
Sus ojos vacíos
nada reclaman.