lunes, 24 de enero de 2022

Violencia de género I

 

Camina, casi flota

ya no necesita empellones.

Se postra ante él.

Su voluntad doblegada

apenas le permite

arrastrar sus despojos.

Se detiene. El insulto la moviliza.

Por un instante levanta la cabeza,

el aire huele a libertad.

Pero, las cadenas invisibles

son más fuertes…


1 comentario:

María Emma dijo...

Publicada en el libro Micrópticos de Editorial Dunken